miércoles, 7 de junio de 2017

Aceptar la diferencia.




Imagen: Tradlands



Aunque parezca una obviedad, la primera dificultad de estilo o, por mejor decir, en torno a nuestro estilo..., es la gestión de las diferencias. Nuestro estilo no se construye sobre lo que nos asemeja con el resto de la ciudadanía, sino sobre aquello que nos singulariza.

Ahora bien... y no creo descubriros nada, nos es mucho más fácil aceptar que "nos parecemos en A, B y C" a asumir que somos "del todo diferentes en X, Y y Z".  Esa tendencia del ser humano a la asimilación con el grupo...

Frente al espejo, solemos mirar la imagen que nos devuelve con ojos críticos. Sano sería que tal crítica fuera constructiva. Lo malo es que, de constructiva, es frecuente que tenga poco y de dura e inmisericorde, bastante. En lo que hace a nuestro contexto, igualmente enjuiciamos y concluimos en tenerlo en menos que esos otros supuestos ideales..., tomados de tantas referencias (más ficticias que reales) como pueblan hoy día nuestra cotidianeidad.

El negativismo es un ciclo en el cual es muy fácil entrar y cuesta mucho salir. Las redes nos han acostumbrado a unos grados de perfección, de belleza y de "felicidad"  que se nos antojan invariablemente superiores a los nuestros. El que sean recortes...., tan solo partes de un todo que desconocemos, del que no se nos muestra más que el minúsculo instante de un click de cámara..., así aislados, medidos, preparados......, nos da igual. No lo valoramos. No lo pensamos. No lo creemos.

De tantas mentiras como construyen tales verdades instagrameables, hemos acabado recreando la nuestra propia...., en la cual nuestra humilde, pequeña, serena y propia cualidad, es despreciada.... No es tan "feliz". No es tan "alta". No está tan "limpia". Tan "organizada". Tan "musculada". Tan "estrecha". Tan "blanca". Tan "abundante". Tan "exquisita". Tan "bien criada". Nuestras flores son menos frescas. Nuestros manteles están menos estirados. Nuestros desayunos son menos bonitos. Nuestras comidas son menos ecológicas y menos nutritivas. Nuestros hijos son menos bellos y visten peor. Nuestros looks nunca destacan en nada. Nuestros complementos parecen de mercadillo. Nuestros zapatos están deslucidos y con las tapas desgastadas... Y así hasta el infinito. En el bucle maldito de la realidad Pinterest, de las ventanas Instagram.... (pues cada foto no deja de ser una ventana a vidas ajenas en la que satisfacer nuestros complejos voyeuristas.....), nunca cabe el aprecio por lo propio. El aprecio sin vanidad y sin envidia. Simple aprecio. Simple satisfacción. Simple abrazo a lo que somos..., con propósito de enmienda de lo enmendable, pero sin iras. Sin nada más.... que nosotros.

"Que el pensar que tal cual eres y tal cual estás merezca tu aplauso, sea anatema". ¿Cuándo decidiste rubricar tu vida.... así.... ?

No abogo por el conformismo, sino por la ilusión por lo propio. Y ni siquiera el conformismo me parece tan malo como la perpetua emulación de lo ajeno y, a menudo, imposible.... para nosotros.... PORQUE LO DIFERENTE NUNCA PODRÁ SER SEMEJANTE.

El fácil y cool deslizarse de esa blogger parisina con su vestido oversized por el metro de París..., mil fotos después de la que última que estás viendo....,  acepta que no se hizo para ti, mamá de tres peques, en un precioso y lluvioso Oviedo un día cualquiera de carreras al cole y sonrisas manchadas de Cola Cao.

Los cropped que tan maravillosamente exhiben las jovencitas veinteañeras con sus tersas cinturas, no sentarán bien mis cincuenta años, no mal llevados... Pero, es un hecho, ya no estoy en la edad de sentarme bien "todo".  Tampoco te favorecerán a ti, otra veinteañera...,  en proceso de dejar las Burguer y los kilos de más ...

Y el paseo rápido de una hora que mantiene tu colesterol a raya, tengas la edad que tengas y la morfología que la naturaleza te haya otorgado, no es equiparable a la hora de gym -diario- con entrenador personal que tu adorada influencer acaba de meterse entre perfecto pecho y firme espalda.

¿Más diferencias....? ¿La que hay entre los jardines de tus cuentas de Instagram favoritas y tu casa sin balcones... siquiera.....? ¿La que supone tener habilidades "fotografiables" para los DIY y ser una negada  -yo misma lo soy- para cualquier manualidad nivel 2º de Primaria....?¿La de ser estrella de Foros y Meetings de emprendeduría frente a tu cotidiano trabajo de "administrativa sin causa"...?¿La de recorrerse Europa cada puente festivo y vacación tras vacación y dejar, por supuesto...,  constancia gráfica de ello...., bellísima, para más decir...., cuando tú no logras ahorrar lo bastante para salir del pueblo de toda la vida..., otro verano más...., o al menos hacer alguna foto que no sea taaaaaan corriente... ?

La verdad de la mentira... ¿Sabes dónde está....?

No os confundáis, insisto. Esta entrada no es un elogio a la resignación, os lo decía más arriba. No es un canto a la inercia, a seguir... por seguir...  A eludir nuestra responsabilidad frente al cambio necesario, frente a la dinamicidad que es el hecho de estar vivos. "El río que nos lleva". ¿Os acordáis del post ...?



Imagen: Hampton SC



Esta entrada sí es, y concluyo...,  la reivindicación de un amor necesario: el amor por tu propia esencia, única, personal e intrasferible... Por tus diferencias. Para, desde ellas, actuar tan diferentemente como convenga a tus objetivos. No las  desprecies, no seas benévola con las que no te convienen..., tampoco. Pacta... Con serenidad, con dignidad. Con humildad, esa cualidad que cada año que cumplo aprecio más.  

A veces, hace falta tomar caminos diferentes para aceptar la diferencia.... Frente al espejo, frente a tu contexto, frente a tus aspiraciones, frente a tus motivaciones. Explora tus propios caminos. Las rutinas tan recomendadas por tu "supermamá instagramer" favorita son "sus" rutinas. ¿Cuáles son las tuyas....? 


Toma tu camino. Diferente. Para aceptar, al seguirlo, tu diferencia. Y, al fin...., que viene a ser el principio de todo cambio...., tu esencia. 



Imagen: Tradlands






"Coaching de estilo by Un bello día". "Porque el estilo nunca comienza en el armario."

mpmolina71@hotmail.com



 

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